Compatible Technology International (CTI) crea herramientas prácticas para ayudar a las comunidades empobrecidas de los países en desarrollo a superar los desafíos críticos de alimentos y agua. Diseñan tecnologías para pequeños agricultores en comunidades rurales, un grupo que comprende aproximadamente el 75% de los pobres del mundo. CTI empodera a estos agricultores, muchos de los cuales son mujeres, con herramientas asequibles que mejoran la calidad del agua, la producción de alimentos y los ingresos.
CTI recibe financiamiento del proyecto a través del Programa de Investigación de Cultivos en Colaboración (CCRP) de McKnight para ayudar a las comunidades agrícolas a mejorar la eficiencia y el valor de la producción de maní y la nutrición infantil en Malawi y Tanzania. Esta iniciativa se alinea con el objetivo de McKnight de explorar soluciones para sistemas alimentarios locales sostenibles mediante el financiamiento de la investigación en colaboración entre los pequeños agricultores, los principales investigadores locales y los profesionales del desarrollo.
CTI empodera a estos agricultores, muchos de los cuales son mujeres, con herramientas asequibles que mejoran la calidad del agua, la producción de alimentos y los ingresos.
CTI trabajó en asociación con la Universidad de Agricultura de Sokoine de Tanzania y el Instituto Internacional de Investigación de Cultivos para las Zonas Tropicales Semiácidas para mejorar la producción de cacahuetes. El equipo se reunió con agricultores en Malawi y Tanzania para identificar los procesos de producción que debían mejorarse. Descubrieron que el levantamiento, el desmonte y el bombardeo eran prioridades. CTI comenzó centrándose en el proceso de desmonte y formó un equipo de investigación para investigar la tecnología existente que podría simplificar el procedimiento. CTI encontró tres diseños potenciales y los llevó a Malawi para probarlos. Además de recopilar datos estadísticos sobre el rendimiento del equipo, CTI solicitó la opinión de los mismos agricultores que había entrevistado anteriormente.
El vicepresidente de operaciones de CTI, Bert Rivers, comentó sobre la experiencia: “Los granjeros estaban encantados. Habíamos estado prometiendo el año pasado, ya que recopilamos información de que regresábamos con el equipo y lo hicimos. Cumplimos nuestra promesa ”.
CTI y el equipo continuaron trabajando con los agricultores para evaluar el diseño, asegurando que el desarrollo se produjera a través de una verdadera asociación entre la organización y las comunidades a las que sirve.